La escuela y la universidad mexicana necesita del aprendizaje situado. La razón de ello radica en la crisis del significado de educar y educarse, el vaciamiento de una formación que no conecta con la realidad. Partir de la realidad, pensar, resolver y contagiar forman parte de un método y una estrategia educativa que busca partir de la vida cotidiana para resignificar contanidos y teorías para regresar a la vida cotidiana con conocimientos aplicados y transformar la realidad en un espacio más justo y digno.
El motivo para aprender debe ser la realidad, este es uno de los incentivos que los estudiantes hoy demandan: apreciar con claridad para qué les sirve lo que están aprendiendo.
¿Cómo educar a nuestros hijos en tiempos violentos e injustos?
Las nuevas generaciones crecen en medio del consumismo voraz, son digitales...
Era 1997 en la Ciudad de México. Por primera vez se elegía un jefe de gobierno del Distrito Federal luego de décadas de tener un regente. Me encontraba dando un taller de elecciones...